Muchas frases hechas se pueden dar en este caso, como la que titula la entrada, u otras como «Se armó el Belén», «Murieron con las botas puestas» o incluso una de nuevo corte «Ángeles y Demonios», por decir algunas, para pronosticar lo que podía pasar en el acuerdo de las Hermandades de la Madrugá.
Había un «fifty-fifty» de que saliera airoso o no, y como en las luchas romanas, el pulgar cayó hacia abajo, ahora viene de nuevo el tira y afloja de un "problema" que colea desde hace años pero que en estos dos últimos ha sido para que se estudie en el Gobierno de los Diputados, con itinerarios alternativos, el egoísmo de nuestra Semana Santa, las disputas de horarios o incluso la memoria histórica cofrade... Todo ello saltó a la palestra en el día de ayer cuando se comprobó que el paso de palio de la Hermandad del Calvario no cabía por la estrechez de la calle San Roque.
Un inciso, desde estas humildes líneas quisiera mandarle una sonora ovación al grupo de priostía de la cuarta hermandad de la Madrugá por el «trabajo extra» que han tenido que realizar sin fruto alguno. Es muy loable.
Y ahora qué... pasamos de nuevo al «Plan Nieto», buscamos una alternativa con lo que con ello lleva o "madre mía que me quede como estoy"... Lo que si es verdad que ayer la partida jugó una mala pasada y la ficha "Madrugá" retrocedió a la casilla de salida.
Dudo, ojalá me equivoque, que si en dos años parecían haberse puesto de acuerdo para esta truncada alternativa, llegar a un acuerdo en 65 días lo veo complicado.
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