Viajamos hoy a la provincia sevillana de Utrera, para analizar, a la Hermandad de los Aceituneros, que procesiona en la tarde noche del Miércoles Santo utrerano, desde la Parroquia de Santa María de la Mesa, con dos pasos, el Señor atado a la Columna y la Virgen de la Paz.
La imagen de Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna es una obra que reune gran belleza y calidad artística y aunque atribuida por el profesor Hernández Díaz al escultor utrerano Ruiz de Gijón, recientes investigaciones realizadas por Antonio Cabrera Rodríguez se podría atribuir su autoría al imaginero Benito de Hita y Castillo, entorno al año 1760. En el año de 1960, la imagen sufrió varios cambios: su columna decreció, para tomar la columna pretoriana adoptada por el Concilio de Trento y se le implantó un dedo del pie que le faltaba, todo esto restaurado por el imaginero Pedro Hurtado. Con el tiempo, volvió de nuevo la columna primigenia alta, que es la imagen que actualmente tenemos.
La imagen de María Santísima de la Paz, es obra del imaginero sevillano Manuel Ramos Corona en el año 1987, siendo esta su primera imagen para la Semana Santa.
El actual paso de Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna es obra del tallista Antonio Ibáñez, siendo el dorado realizado en los talleres de Sanmartín. Su composición se basa en el retablo en el que recibe culto el Señor, contando con cuatro capillas en cuyo interior se reproducen escenas alusivas a las imágenes que reciben culto junto al Señor. De esta forma, en la capilla frontal se reproduce el duelo de la Virgen, en la trasera el encuentro con la Santa Mujer Verónica en la calle de la Amargura, y en las laterales la entrega de la Virgen a San Juan, como madre de los cristianos y la Resurrección del Señor anunciada a María Magdalena, todas obras del imaginero utrerano Sebastián Martínez Zayas.
El paso de palio de María Stma. de la Paz data del año 1998, cuando se estrenan las caídas del palio bordadas sobre maya de plata según diseño del bordador Jesús Migueles Fuentes y que serían acabadas en el taller de Fernández y Enríquez, de la localidad sevillana de Brenes. En el año 2.010, año del Cincuentenario corporativo, la hermandad vio engrandecido su patrimonio al culminar el techo de palio bordado en maya de plata en los talleres del bordador moronense, Manuel Solano.
Los nazarenos de esta Hermandad visten túnica con cíngulo verde, y capa y antifaz en color blanco.
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