Nuestra entrada de blog de hoy se dedica, de nuevo, a la hermandad de las Reales Cofradías Fusionadas de la ciudad de Málaga, y más concretamente analizaremos todo lo concerniente al Stmo. Cristo de Azotes y Columna, una de las seis imágenes titulares de esta corporación, puesto que en otras entradas ya analizamos al Cristo de las Ánimas de Ciegos y al Cristo de la Exaltación, también perteneciente a la Hermandad.
La imagen de Nuestro Padre Jesús de Azotes y Columna es de autor anónimo, realizado entorno al año 1730, respondiendo a los modelos creados por Mena en el siglo XVII, reproducidos hasta la saciedad por gran cantidad de artistas locales de menor rango y seguidores del maestro granadino. Algunas investigaciones apuntan la posible autoría de Miguel de Zayas, aunque parece muy aventurada esta posibilidad debida a la falta de piezas de dicho artista que puedan promover un estudio comparativo de su obra. Su carácter plenamente procesional como vértice de un grupo de misterio se demuestra en su dinámica postura a través del movimiento impreso en las piernas y la violenta expresión crispada por el sufrimiento, de marcado carácter dialogante.
El grupo escultórico que representa el pasaje de la flagelación al Señor, está realizado por el escultor malagueño Juan Vega Ortega en el año 2013, compuesto por cuatro figuras secundarias, con las distintas actitudes del hombre ante el suplicio de Cristo: la agresividad, la indiferencia, la extrañeza y la pernicidad.
Además, la grandeza de este misterio se encuentra en los pequeños detalles. En la túnica morada sobre la piedra, en las vestiduras de los verdugos, en las corazas de los centuriones o en las vistosas plumas de color ocre de los cascos. También en los flagelos, realizados en Córdoba con dientes de cabeza de cabrito. Y hasta en el pergamino, escrito en latín, con el texto de la condena a latigazos, donde Juan Vega firmó su creación.
El suelo del trono es una recreación del Lithostrotos o patio del Pretorio donde fue azotado Cristo.
El trono procesional fue estrenado en 2012, en madera tallada y orfebrería realizado por el tallista Juan Carlos García de la población gaditana de San Fernando y la orfebrería del taller de Aragón y Pineda de la provincia granadina de Motril. La mesa metálica del trono ha sido efectuada en Córdoba. El diseño está inspirado en las tallas de la sillería del coro de la S. I. Catedral de Málaga.
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